El objetivo de este trabajo es mostrar la diferencia de precios entre el precio en góndola que paga el consumidor por el vino como producto final (sea en tetra o en botella) y el precio que recibe el productor elaborador de vino (de traslado).
El concepto de rentabilidad analizada en este informe corresponde a la relación o brecha de precios entre el precio en destino – góndola – y el precio que pagan las bodegas fraccionadoras a las bodegas trasladistas por el vino en origen – de traslado. Es decir que, al hablar de rentabilidad, en este caso se hace referencia a la diferencia de precios que separa a los productores y al consumidor, por tanto es un indicador de la rentabilidad, medida en términos de relación o diferencia de precios, del resto de la cadena desde que el vino se fracciona hasta que llega a la góndola. Esta rentabilidad es la brecha de precios existente entre los productores y el consumidor.