En mayo, un productor de uva necesitó 3.027,62 litros de vino tinto o 4.931,94 de blanco para pagar un mes de trabajo a un obrero común, con 9 a 12 años de antigüedad, mientras que en el mismo mes del 2014 requirió 2.298,03 o 2.675,97 litros, respectivamente.
Es decir que en cuanto a la mano de obra, la variación interanual fue de 31,7% en el vino tinto y 84,3% en el blanco.