Domingo 27 de noviembre 2016. Por Gastón Bustelo – Diario Los Andes
Convertida en ley por los legisladores de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) la prohibición de realizar publicidad en la vía pública por parte de las bebidas alcohólicas, desde la industria vitivinícola comienzan a delinear acciones para frenar la avanzada legal.
El primer paso será trabajar sobre la reglamentación para amortiguar el impacto, pero como no se esperan demasiados resultados, ya analizan la posibilidad de presentar una acción de amparo cuando se promulgue la ley para frenar los efectos de la norma. Así lo indicó el titular de Coninagro, Carlos Iannizzotto, quien también está en el directorio de Fecovita.
Si bien el artículo 4 de la ley establece la prohibición, en el 5 se fija el 75% de espacio en el que se deben incluir las leyendas que advierten que el alcohol es perjudicial para la salud. La idea es tratar de bajar el porcentaje en la reglamentación.
“Santilli nos dijo que iba a tratar de excluir al vino de la ley, pero no fue así. Por eso es que si bien está la intención de ayudarnos en la reglamentación para limitar las leyendas, ya analizamos la presentación de un amparo”, sentenció Iannizzotto. Es que ahora los dirigentes no le confían al vicejefe del PRO, Daniel Santilli.
Ignorantes
El jueves pasado, distintos referentes del sector vitivinícola y funcionarios locales, se reunieron con autoridades de CABA para explicarles las complicadas consecuencias que ocasionaría la prohibición que entonces era un proyecto de ley, pero lo aprobaron el viernes.
Los dirigentes de las entidades vitivinícolas entienden que el vino fue víctima de un mal diagnóstico, debido a que surgen las prohibiciones a las bebidas alcohólicas como consecuencia de las muertes que generó la fiesta electrónica en Costa Salguero.
Sin pelos en la lengua, Juan Carlos Pina, de Bodegas de Argentina, fue contundente al señalar que “la ley es inútil. No tienen sentido estas advertencias como sucede con el cigarrillo. Es complicado que sea en Capital Federal porque insta a que las provincias hagan lo mismo.
Esto impacta en el consumo. Ahora las bebidas competitivas como las gaseosas tienen el espacio liberado”.
Pina destacó que en Capital y en provincia de Buenos Aires se concentra hasta el 55% del consumo de vino por la alta densidad poblacional.
El titular de la Unión Vitivinícola Argentina, José Zuccardi, indicó que al englobar el vino como alcohol, se desconoce el concepto del vino como alimento y desconocen la ley del vino como “bebida nacional”. Se encubren grandes falencias que pasan por la droga y se regala el mercado y los medios a las bebidas azucaradas que dañan la salud”.
El empresario señaló también que “la estructura política de las provincias vitivinícolas no actuó a tiempo y ahora ya está la ley sancionada en Capital Federal. Los gobernadores de las provincias vitivinícolas y los legisladores deben estar atentos porque afecta nuestras economías”.
Por su parte la titular de la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar), Hilda Wilhelm, coincidió con Pina y Zuccardi, contó las gestiones que realizaron el jueves para frenar la ley y explicó que “les explicamos que publicitamos valores, el diálogo y la unión entre las familias.
Nos sentimos discriminados porque justo el 24 de noviembre, el día que se festeja el Día del Vino como bebida nacional, nos enteramos de esto. En las jornadas de Coviar que estábamos haciendo en Cancillería, la ministra Susana Malcorra puso a la cadena vitivinícola como ejemplo de lo que tiene que hacer el país, pero los legisladores porteños actuaron de otra forma”.
Más gestiones
“Trabajaremos para ver si podemos limitar las prohibiciones en la reglamentación y hacer que no llegue al 75% como dice la ley”, indicó el ministro de Economía, Infraestructura y Energía, Enrique Vaquié.
Por su parte, el diputado nacional radical Luis Borsani, dijo que organizará “una reunión con las autoridades de CABA y con todos los legisladores por Mendoza para ayudar a la vitivinicultura”.