El combate se dio en la margen derecha del río Paraná y en el norte de la provincia de Buenos Aires, en un recodo donde el cauce se angosta y gira conocido como Vuelta de Obligado.
El cooperativismo vitivinícola recuerda aquella epopeya y la heroicidad de sus participantes. Ese valor está en quienes enfrentar la adversidad y apuestan al país a pesar de todo, como nuestros productores que sostienen en alto la insignia nacional argentina.