Por Santiago Mampel. Enviado especial a Monje, Provincia de Santa Fe.
Desde el 8 al 11 de junio se presenta una nueva edición de la mega muestra agropecuaria argentina AgroActiva 2016 en Monje, provincia de Santa Fe. La Expo agraria más grande en Argentina, se presenta como la mejor vidriera para exponer los adelantos tecnológicos, el mayor centro generador de negocios y capacitación elegido por productores, profesionales técnicos e investigadores. Además de un espacio de reunión y entretenimiento para toda la familia.
En total, son 120 ha. En este ámbito los expositores de todos los rubros exponen en stands de todos los tamaños y producciones. La exposición cuenta con sectores específicos dentro de la muestra estática que año a año van tomando mayor relevancia, como el sector de AgroActiva Ganadera; un área a la que se suma la exposición de ganado en pie, remates y un sector de Lechería. También hay espacios dedicados a Ronda de Negocios Internacionales, Capacitación, con auditorios específicos, y AeroAplica, la ya clásica sub muestra de aeroaplicadores.
Se estima que la recorren un promedio de 40.000 visitantes al día.
El sector vitivinícola cooperativo se hizo presente a través de Fecovita con un moderno stand. Allí estuvo el Dr. Carlos Iannizzotto, vicepresidente de Coninagro y gerente de Fecovita: “En este momento, en el contexto de una feria con tanta gente, con tanta tecnología, con tantas entidades como el Banco Nación que acaba de lanzar una línea de crédito interesante, se abre otra perspectiva”, destacó.
“Es como un auto que estamos poniendo en marcha y queremos que ande con todas sus potencialidades. Hoy lamentablemente todavía no podemos decir que está en funcionamiento, por las condiciones climáticas, las condiciones internas y externas que nos impiden tener un presente mejor, pero tenemos esa esperanza, esa expectativa por el trabajo y el esfuerzo de la gente de campo”.
“Con Coninagro venimos haciendo viajes en el exterior, por ejemplo España y Francia, para hacer acuerdos colaborativos que nos impulsen al crecimiento. Las entidades como Coninagro están a disposición de que estos cambios positivos se den y ha hecho junto con Fecovita propuestas para los productores y su economía”, detalló.
Los Duflos se llevaron el premio a la Familia Rural del Año 2016.
AgroActiva distinguió a la familia de Fabián y Adriana Duflos, con el premio a la “Familia Rural del Año 2016”, que reconoce la tradición, valores, costumbres y el estilo de vida de grupos familiares por su trabajo y vida en el campo. Oriundos de San Jorge y con orígenes tamberos estos pequeños productores siguen luchando para mantener la tradición de vivir en el campo. Además, son contratistas de cosecha y hace pocos meses comenzaron con la cría de cerdos.
Carlos Iannizzotto, vicepresidente de Coninagro, dijo al entregar el premio: “Es un honor para nosotros poder participar de esta feria que es la principal del país y traer nuestro producto, traer el esfuerzo de nuestra gente. Yo soy productor viñatero y por lo tanto sé lo que significa el trabajo en la tierra, el arraigo, el desarrollo local y el vino está vinculado a la familia, está vinculado al brindis, está vinculado a la alegría”.
“Por todo lo que significa, queremos estar presentes en Agroactiva y con este premio especial, porque fortaleciendo la célula básica de la familia, sobre todo si es rural, vamos a crear lo que más necesita este país que es estrechar vínculos, a través del amor y a través de la amistad. Para nosotros es un honor ser partícipes de este momento y conocerlos a ustedes que son representantes de tantas familias que están haciendo el esfuerzo de extender el campo argentino”
Fabían Duflos, emocionado por el reconocimiento, recordó las dificultades que atravesaron en los últimos meses por las inclemencias climáticas, al marcar: “Este último año fue terrible, por el tema de tambos y cosecha. En el tambo no quedó pastura, la cosecha fue muy mala. Lo que se pudo levantar antes de la lluvia zafó, pero todavía hay soja a levantar. Fue muy grave este año el tema del campo”.
Al recibir el premio también dijo: “Peleando contra el clima, contra políticas equivocadas, los productores pequeños estamos marginados porque no nos llega el apoyo o cuando llega, ya es tarde. Sin embargo sin los pequeños productores el campo no avanza. Estamos nosotros, pero hay miles de familias que podrían estar acá. Luchar contra el clima no se puede, pero necesitamos que los gobernantes nos apoyen, sean del color político que sean”.
Su esposa, Adriana, de 38 años, manifestó: “Él hace el trabajo de campo, con los chicos vendemos huevos y la plata es para lo que ellos necesiten: ropa, escuela o deportes. Estamos con eso, se enganchan y los venden. Tenemos 200 gallinas”.
“Las últimas lluvias nos trataron mal en todo sentido. La cosecha fue terrible en el departamento San Martín. Estamos agradecidos de ser elegidos, reconforta, pero como nosotros hay miles de pequeños productores, y los gobernantes no se fijan en los pequeños productores”, acotó Fabián.
La distinción “La Familia Rural del Año” no es una competencia, ya que no premia producción, cantidad de hectáreas o rendimiento económico de los establecimientos agropecuarios, sino que apunta a valores y tradiciones familiares rurales. En esta oportunidad, se los premió con un cuatriciclo de Kymco.
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