El trabajo elaborado por el Observatorio de Economías Regionales de ACOVI tiene como objetivo poder brindar una herramienta que permita comparar los costos de cosecha bajo los sistemas: manual tradicional, asistida y mecanizada.
El enfoque utilizado al momento de comparar las alternativas de cosecha es meramente económico, es decir que se establecen mediciones del costo de cada factor que influye en los diferentes sistemas, de forma de establecer la conveniencia económica de cada uno, bajo diferentes niveles de rendimiento.
El presente estudio se limita a conseguir una herramienta que permita calcular el costo de cosecha estimado bajo los distintos sistemas de cosecha, para tener una referencia numérica y económica de cada uno y contribuya a una mejor toma de decisiones. La metodología surge de analizar los tres métodos en un escenario con variables fijas y con supuestos establecidos que permita una comparación de costos y análisis de variables preponderantes en cada caso.
La realidad de cada alternativa de cosecha es muy compleja, ya que intervienen numerosos factores que hacen que cada caso concreto sea distinto, con lo cual la fijación de supuestos y simplificación de la realidad es necesaria para poder comparar y cuantificar las variables. Es por ello que pretende ser una herramienta más para la toma de decisiones, analizando los costos de la cosecha, actividad con un peso relativo muy importante en el ciclo productivo vitícola.
En este sentido, la necesidad de contar con cálculos de costos de este proceso es sumamente importante para poder estimar la rentabilidad de productor, reconociendo que es el eslabón más perjudicado en la cadena de valor y el que menor proporción de rentabilidad se lleva a su bolsillo.
Con esta herramienta, se pretende colaborar con este proceso tan complejo, estimando los costos para esta temporada y permitiendo una comparación simplificada de los sistemas de cosecha, en pos de hacer sostenible la actividad del productor. Desde el punto de vista cooperativo y atendiendo a la realidad de los pequeños productores que lo integran, los resultados del informe evidencian el inicio de un camino hacia la reconversión tecnológica de la cosecha, como solución intermedia entre la cosecha tradicional, de altos costos y riesgos y la cosecha mecanizada, también inviable por las características del pequeño productor.
Se hace necesario repensar el actual sistema, hacia un modelo productivo integral con cosecha asistida, que mantenga las fuentes de trabajo que se generan en las fincas, pero con mejores condiciones laborales, espaciales, de calidad y eficiencia.