Compartimos las palabras de Eduardo Sancho, presidente de ACOVI y de FECOVITA en el Almuerzo de Productores del sábado 4 de mayo en Bodega Toro (San Martín):
Muchas gracias por estar acompañándonos en este día tan especial en el que nos reunimos en esta, la casa de todos los productores de FECOVITA, para agradecer a Dios y a nuestra Virgen de la Carrodilla por la nueva cosecha. Quiero agradecer por su presencia a los representantes de entidades vitivinícolas, a las autoridades gubernamentales y muy especialmente a todos los productores y sus familias. Agradezco también a todo el Consejo de Administración de FECOVITA y a los consejeros de las cooperativas que con su esfuerzo diario hacen posible nuestro sistema cooperativo.
Hoy es un día de encuentro para compartir un grato momento y también es propicio para una reflexión acerca de cómo estamos. Todos nosotros, los productores, conocemos el contexto y sabemos que no somos responsables de la macro economía, ni siquiera de la microeconomía. No somos responsables de la corrección de 100 % del dólar, ni de los ajustes de tarifas, ni hemos decidido la suba de las retenciones, ni la quita de los reintegros a las exportaciones. Y mucho menos podemos alterar el ciclo de los insumos dolarizados… Tampoco hemos decidido el nivel de tasas insólito que todo el mercado está padeciendo.
Hay muchas cosas que no podemos resolver, que no dependen de nosotros. Y esto no es un reclamo. Sólo una observación de la realidad. Pero SI estamos convencidos de que hay mucho por transitar y que mucho puede resolverse con verdadero diálogo institucional, abierto, sincero y eficaz. Con palabras pero también con acciones positivas. Siempre estuvimos y estaremos dispuestos a dar nuestro compromiso y esfuerzos por el bien común del sector, entendiendo que también lo es para toda la comunidad en la que nos desarrollamos.
La soberbia, la falta de diálogo, la disolución de las instituciones sin propuestas, no resuelve nada. Al contrario, nos aleja de las soluciones. Estamos seguros de que el único camino para resolver nuestros problemas es más diálogo, más humildad, fortaleciendo las instituciones que tenemos. Por eso apoyamos fuertemente a COVIAR que permite a todos los actores ser parte de la solución. Esta institucionalidad nos ha permitido junto con el liderazgo del Gobierno y con el apoyo de la oposición, sacar medidas esenciales para la vitivinicultura como el “Fondo Anticíclico”, un pedido de larga data de la vitivinicultura. Y que, si sabemos aprovecharlo, será un instrumento clave que nos permita recuperar el precio al productor.
También agradecemos el trabajo realizado para detener medidas nacionales, que realmente iban contra toda lógica. Fue clave para el éxito de este reclamo la organización del sector, encabezado por el Gobernador, en materia del impuesto al vino, la falta de fondos para la lobesia, la prohibición de publicidad del vino en la ciudad de Buenos Aires, y el cambio en las cargas sociales.
Pero debemos avanzar, ya que no hemos logrado el objetivo de tener una rentabilidad mínima para nuestros productores. Para esto es fundamental la eliminación total de las retenciones a las economías regionales, favorecer los acuerdos internacionales, revisar la distribución en la cadena vitivinícola donde siempre el productor primario es el más castigado, por la alta carga impositiva, la pesada cadena comercial y también, para ser realistas, por la falta de cumplimientos de muchas bodegas en sus compromisos a los productores, que los coloca en una situación crítica para continuar en la actividad.
A esto, hay que agregar la evidente desinversión en la producción primaria, sobre todo del pequeño y mediano productor, debido principalmente al prohibitivo acceso al financiamiento. Este es el factor más crítico para la competitividad de los productores. Por ello desde FECOVITA venimos aplicando herramientas para darle solución. Ya hemos dado más de 100 millones de pesos a nuestros productores a 10 años a valor vino. Agradecemos, en este aspecto, la ayuda del Fondo para la Transformación, ya que como se comprometió el Gobernador, por cada peso que pone FECOVITA, el Fondo pone un peso. Solicitamos continuar con este operativo ante la falta de crédito adecuado del sistema financiero.
También resulta fundamental en este sentido, el avance que ha realizado CONINAGRO en la creación de una SGR para todo el sistema cooperativo agrario de Argentina. Aprovechando que nos acompaña el Superintendente de Irrigación y varios inspectores de cauce, reconocemos las obras realizadas, pero necesitamos mayor inversión en riego, fundamentalmente para mejorar la infraestructura para la entrega del agua a la demanda, única forma de poder iniciar la presurización y mecanización de nuestros viñedos.
Nuestra misión es darle sustentabilidad al productor. Estamos redoblando los esfuerzos para estar cerca de nuestra gente, de ustedes, de nuestra cadena de valor, escuchando todos sus padecimientos. Somos cooperativistas. Ese es nuestro ADN, nuestra esencia. Lo sentimos con verdadero orgullo porque todo nuestro esfuerzo y dedicación se reinvierte en la organización.
A algunos de nosotros nos toca circunstancialmente formar parte del equipo directivo a través del Consejo, pero nunca perdemos de vista que el objetivo principal es la defensa de nuestros productores, que son las mujeres y los hombres que forman parte de esta gran familia, el verdadero motor de la organización. En el 2018 desde FECOVITA hemos pagado el vino tinto un 28% más de lo que pagó el mercado. Pero los productores sabemos que ésta y otras acciones que hemos tomado no son suficientes. No nos alcanza.
La realidad nos marca un contexto complejo que nos va a exigir mucho más a cada uno de nosotros y que, por cierto, va más allá del resultado de un programa económico que decida un gobierno. Hay mucho que podemos y debemos hacer. Afuera hay un mundo que valora nuestros productos, el vino argentino.
Nuestro vino de FECOVITA.
Por eso estamos trabajando desde los cimientos, desde adentro para ser mejores y más competitivos. Para darles futuro a todas nuestras familias, más allá de lo que tengamos que enfrentar.
- Estamos implementando cambios profundos en estándares globales de calidad y gestión por procesos. Bajando costos internos, mejorando los procedimientos para ser más eficientes. Tanto en la producción como en la estructura logística, comercial y administrativa.
- Hoy nos diversificamos en marcas y estamos en todos los segmentos de mercado, porque los nuevos consumidores exigen variedad y constante superación, con nuevos lanzamientos.
- Bodega Estancia Mendoza es una de las 5 bodegas más premiadas, y nuestro vino Malbec de Malbecs de Bodega Los Helechos fue el vino más premiado en el 2018.
- Hemos logrado que nuestro querido y centenario Toro, sea la segunda marca más vendida en el mundo.
- Apostamos a la internacionalización, con presencia en más de 30 países y desarrollo de nuevos mercados.
- Buscamos consolidarnos en el mercado argentino, pero para tener futuro debemos salir y competir con el mundo.
- Hicimos una inversión contundente en esta Bodega Toro, cuya finalidad es la de brindar eficiencia a toda la cadena, necesaria para poder competir con las exigencias de los mercados internacionales y transferir mejor precio a nuestros productores.
- Todo esto lo hacemos para lograr un modelo exitoso de gestión fundado en la asociatividad -con base en el espíritu cooperativo- con elevados niveles de alineación estratégica entre los negocios de los diferentes eslabones de la cadena y con protagonismo en la política vitivinícola.
Como productores integrados tenemos una serie de herramientas muy importantes para lograr la adecuación de nuestros viñedos a los estándares de una actividad cada vez más exigente y competitiva.Sabemos que si no aprovechamos esta oportunidad, es muy probable que quedemos en el camino y, claramente, no estamos dispuestos a eso. Juntos vamos a construir un mejor futuro para la industria vitivinícola argentina. Nos estamos preparando para enfrentar y superar los desafíos de un mercado global y complejo.
Contamos con la dedicación y la fuerza de todos ustedes y de sus familias para seguir construyendo una mejor organización. Pero hoy queremos hacer una mención especial al aporte y dedicación de nuestras mujeres cooperativistas, representadas por las presidentas de Cooperativas, Alicia, Hilda, Adriana y Amalia. En el nombre de ellas un reconocimiento a todas nuestras mujeres que todo los días nos acompañan en construir una Argentina mejor.
El gran desafío para todos nosotros, los productores y las cooperativas, es que podamos integrarnos más, generando lazos más profundos de confianza y vínculo genuino para el bien de nuestra vitivinicultura y de nuestra querida Patria.
Contamos con todos Uds. Gracias por estar acompañándonos.