El Observatorio Cooperativo de ACOVI elaboró un informe sobre los costos de la cosecha en 2019. El aumento promedio en los costos de la cosecha manual ha sido 23%; el de la cosecha asistida, 26% y el de la cosecha mecanizada, 73%.
“En este informe se desarrollan tres modelos en pos de cuantificar económicamente el costo operativo de cada uno de ellos. La cosecha asistida o con bines se posiciona como la más conveniente, con mayor flexibilidad y adaptación al productor de pequeña escala. También hay otros factores a tener en cuenta en la asistida como una mejor calidad de cosecha por el cuidado de la uva, una labor más humanizada y más productiva”, afirmó Eduardo Sancho, presidente de ACOVI.
Cosecha manual. Sigue siendo el método predominante como forma de cosechar la vitivinicultura local. Como se puede observar es un sistema mano de obra intensiva y dependiente. Ha tenido un incremento en promedio de un 23% respecto al año 2018. La mano de obra (pago de fichas a los cosechadores) representa del 47 al 58% del costo total de la cosecha.
Acerca de los accidentes de trabajo, en base al último informe anual de la Superintendencia de Seguros de Trabajo (2017) en lo que es cultivo de vid en Mendoza, por cada 1000 asegurados, se han informado 51 casos de accidentes de trabajo/enfermedad profesional en el año (durante todo el ciclo), es decir que si bien es un índice general para el cultivo de vid, la probabilidad de ocurrencia de un accidente es mayor si la cuadrilla de personal es mayor.
Cosecha asistida. Es una opción que surge, por un lado, de la dificultad de conseguir y gestionar mano de obra, y por otro, a la necesidad de tecnificar los métodos, en búsqueda de alternativas más eficientes desde el punto de vista del productor y más humanizada desde el punto de vista del trabajador. Así, con distintos tipos de técnicas y maquinaria complementaria a la mano de obra, es una alternativa que permiten aumentar la productividad y también mejorar las condiciones del trabajo manual.
Los costos de esta modalidad de cosecha han aumentado en promedio 26%.
Cosecha mecanizada. Tuvo una suba en promedio del 73% debido al aumento del dólar y esta temporada se presenta como una alternativa muy costosa.
Para las tres modalidades de cosecha, el caso tomado como análisis es el un productor que administra 10 hectáreas de viñedos, viendo las posibilidades con uvas de alto rendimiento (200 quintales/hectárea) y de menor rendimiento (90 quintales/hectárea). La distancia entre la finca y la bodega se estima en 25kilómetros y se calcula el costo de flete en base a la tarifa sugerida por APROCAM para la cosecha 2019.
Los tres sistemas: ventajas y desventajas
Según ACOVI, en el método asistido el ahorro es mayor mientras menor rendimiento que presenta la uva. En tanto que, sólo para uvas cuyo rendimiento sea de 250 qq/ha, se apreciaría una conveniencia económica de la máquina para cosechar.
En cuanto a la promoción de la cosecha asistida, Nicolás Vicchi, subgerente de ACOVI, sugirió adoptar “mecanismos de incentivo para que pueda comenzar a migrar su forma de cosechar, como una línea de financiamiento o incentivos fiscales a plazos acordes (5 a 7 años) para que pueda ir equipando su kit de cosecha asistida”.
“Otro mecanismo es repensar el funcionamiento del Convenio de Corresponsabilidad Gremial para el caso de cosecha asistida, de forma que una menor alícuota pueda mejorar aún más los costos de este sistema permitiendo mayores incentivos para su implementación”, subrayó.
Una tercera opción es convocar a la integración de productores para que, en escala o a través de una cooperativa, puedan desarrollar el servicio de cosecha asistida y brindarlo entre ellos y hacia otros productores de la zona.
Fuente: Mario Simonovich, Diario MDZ